Con un despliegue de cultura viva, la Entrada Autóctona en Quillacollo se convirtió en un vibrante escenario donde comunidades y grupos autóctonos celebraron sus raíces. Los coloridos atuendos y la majestuosidad de las tradiciones ancestrales llenaron las calles al son de quenas y zampoñas, mostrando al mundo la riqueza de nuestras costumbres.